A lo largo de este primer
cuatrimestre del curso 2014-2015 podemos extraer diversas experiencias con el
fin de analizarlas, sacar conclusiones y mejorar el funcionamiento tanto del
movimiento estudiantil como del movimiento obrero y sindical que se gesta en
nuestra universidad.
En la temática del movimiento
estudiantil universitario hemos comprobado un claro reflujo en la
UAM. No se ha conseguido consolidar lo que
fueron los momentos álgidos del movimiento estudiantil de la UAM en el primer cuatrimestre del curso pasado, con la huelga estudiantil de octubre. Hay que destacar que en lo que llevamos
de año no se ha podido convocar huelga en nuestra universidad por la falta de
legitimidad que disponía.
Indagando en esta falta de
legitimidad podemos apreciar como primera motivación de esto la falta de claridad en la postura organizativa
asamblearia. Debemos ser hábiles en esta coyuntura de la lucha de clases y
extraer las experiencias de esta fase del movimiento estudiantil, el
asamblearismo. Es bien cierto que las asambleas han servido para aglutinar a un
buen conjunto de estudiantes pero la propia concepción de asamblea continua y
sin un órgano permanente que saque adelante todos los acuerdos hace que este movimiento
estudiantil tienda al propio reflujo. Por ello, la propuesta esencial de la que
nos tenemos que dotar los estudiantes de extracción obrera y popular en la
actualidad es la de la creación de una superación cualitativa del movimiento
asambleario, una estructura capaz de transformar todos los flujos en el
movimiento estudiantil en lucha organizada y constante y a su vez ser una
estructura tan sólida que sepa afrontar los reflujos del movimiento. La única
estructura con estas premisas es el Sindicato Estudiantil, que tanta falta nos hace a los
estudiantes universitarios en general y a los de la UAM en concreto.
Sin embargo en la UAM debemos sacar una rica experiencia del movimiento estudiantil en el campus de Begoña. En ese campus el estudiantado ha comprendo la necesidad de cristalizar toda la lucha en un órgano continuo y constante, se formó el Bloque Estudiantil de Begoña.
Sin embargo en la UAM debemos sacar una rica experiencia del movimiento estudiantil en el campus de Begoña. En ese campus el estudiantado ha comprendo la necesidad de cristalizar toda la lucha en un órgano continuo y constante, se formó el Bloque Estudiantil de Begoña.
Por otro lado, nos hemos
encontrado con diferentes luchas de trabajadores en la UAM. La más reseñable y la
que más revuelo a causado ha sido el conflicto de la cafetería de Psicología en el que ya la Juventud Comunista mostrábamos nuestra postura al respecto. Pero de este conflicto la mayor experiencia que se puede extraer es la necesidad de que el estudiantado apoye la lucha obrera. Durante este conflicto el estudiantado ha estado codo con codo con los trabajadores de la cafetería y es una muestra en lo concreto de la necesidad de conformar una alianza entre la clase obrera y los sectores populares, en este caso el estudiantado, en unas claves revolucionarias con el fin de acumular fuerzas. De esto, de lo concreto, se sonsaca que en lo general es necesario la creación del Frente Obrero y Popular por el Socialismo .
En el movimiento obrero y sindical también cabe destacar las penosas condiciones laborales a las que están sometidas las trabajadoras de la limpieza de la UAM. Un ejemplo de ello es que han llegado a estar dos meses sin cobrar su sueldo, además cada dos años, con la entrada de una nueva empresa privada, se las amenaza con un ERE o con peores condiciones laborales. Frente a estos las trabajadoras han comprendido la necesidad de luchar y organizarse bajo la bandera de la unidad, a parte han comprendido que al igual que el Rectorado tiene implicación en sus lamentables condiciones laborales la entrada de una empresa privada en la universidad solo las implica explotación.
Con estas experiencias la Juventud Comunista hemos llevado a cabo a lo largo de este cuatrimestre una campaña reivindicando una República Socialista porque realmente todas las luchas contra las problemáticas concretas solo tienen una alternativa para la clase obrera y es el derrocamiento del vigente sistema capitalista y la construcción de uno socialista-comunista. La necesidad a su vez de organizar todas las luchas, tanto obreras como populares, en unas claves revolucionarias es una prioridad del momento actual y por ello la Juventud Comunista en la UAM estará en todo conflicto derivado del sistema capitalista.
¡Sin organización no hay victorias!
¡Por la República Socialista!
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